Lo mío no fue el alcohol ni el cigarro, ni los antros ni las pedas, lo mío fue el sexo con mi pareja de entonces, mi marido desde hace 25 años. Ese momento de expectación, la urgencia de escaparnos de la uni para terminar en un motel, la aventura de descubrir nuevas sensaciones y nuevas formas para profundizar nuestro amor. Lo cierto es que la anatomía de las mujeres está hecha para el placer porque nuestro cuerpo es, de la cabeza a los pies, una zona erógena donde la mente es el órgano más importante.
Esta propuesta de la Dra. Jenny Marques, periodista, sexóloga y doctora en Conducta Humana explica que, aún cuando el deseo sexual se va naturalmente transformando entre las parejas que tienen muchos años juntos, conectar la mente en modo sexo permite mantener la llama viva y la relación sana.
Pero ¿qué significa tener la mente en modo sexo?
Comprender que en nuestra sexualidad radica nuestro poder, al ser el sustento de la vida y una fuente inagotable de dopamina, oxitocina, serotonina y endorfina, conocidas como las hormonas de la felicidad, por lo que activar nuestra disposición a la intimidad es fundamental para sentirnos bien, ser más creativas y vivir una vida más plena y feliz.
Para configurar nuestra mente en modo sexo Jenny recomienda:
- 1Pensar en sexo y, por supuesto, comunicarle a tu pareja lo que estás pensando.
- 2Fantasear. Imagina qué te gustaría hacer con tu pareja, dónde y cómo. Hazlo realidad.
- 3Leer literatura erótica. Una forma fácil para encender tus motores sin tener que explorar cosas nuevas.
- 4Jugar y alargar los preliminares. Vivimos en una época genitalcentrista, pero como mujeres necesitamos un estímulo ajeno al clítoris o los pechos, es algo que se tiene que hablar y ajustar.
- 5Tomar la iniciativa. Seamos honestas, casi nunca tomamos la iniciativa, pero a ellos también les gusta sentirse deseados y a nosotras nos expande los límites que nos establecieron en nuestra crianza.
Para mí, reconectar mi mente al modo sexo ha sido una aventura llena de risas y descubrimientos, especialmente de mí misma. Hoy soy más atrevida, más relajada, menos apresurada y estoy más contenta; al mismo tiempo que ha resultado clave para que mi matrimonio –que entre noviazgo y unión suma 33 años– siga teniendo chispa. Con tantas facetas que la gran mayoría de nosotras jugamos día a día, nos hemos vuelto expertas en la reinvención. Es hora de reinventarnos, también, en el sexo, para desarrollarnos en plenitud y bajarle dos rayitas a la dupla que el deseo y la culpa juegan en nuestra cabeza. Así que a “sacar a la tigresa que llevamos dentro”, como propone Jenny Marques.
¿TIENES LA MENTE EN MODO SEXO?
Para saber cómo andamos en ese tema Jenny Marques propone hacernos las siguientes preguntas (entre muchas otras posibilidades):