Las emociones tienen un papel importante en todos los ámbitos de nuestra vida diaria, desde cómo nos relacionamos con los demás y qué decisiones tomamos, hasta cómo manejamos nuestras finanzas.
Es así como nuestra relación emocional con el dinero está basada en las experiencias que hemos tenido con éste –en la infancia, adolescencia y vida adulta–, en la educación financiera que recibimos y la forma en la que vimos a nuestros padres manejar el dinero, de tal suerte que mientras para algunas personas el dinero representa seguridad, orgullo e independencia, para otras significa rechazo e inseguridad.
Si sientes miedo e incomodidad al hablar de temas financieros, es probable que tengas una relación negativa con el dinero, que se repite en un ciclo continuo. Según el psicólogo y escritor norteamericano Daniel Goleman, la inteligencia emocional es la capacidad de descubrir las emociones y sentimientos propios, reconocerlos y manejarlos para crear una motivación propia y gestionar las relaciones con otras personas y, hablando de finanzas personales, con el dinero.
Así pues, reconocer las emociones y los miedos que nos genera el dinero es clave para crear una relación sana con él, por ello, a continuación te presentamos algunas preguntas que te permitirán identificar estos sentimientos:
Entender las emociones que sientes relacionadas con tus finanzas es el primer paso para la inteligencia emocional, una vez que las hayas reconocido trata de analizar la realidad objetivamente y establecer metas alcanzables de gasto, ahorro e inversión que te permitan ir acumulando experiencias positivas relacionadas con el dinero.
Recuerda que la inteligencia emocional con el dinero te permitirá tener expectativas reales de tu situación económica, visualizar tus finanzas a largo plazo, moderar el riesgo y poner límites a los impulsos de gastar en cosas no planeadas.