Después de dos años y medio de pandemia, de no haber salido de casa, muchas personas pueden estar planeando unas merecidas vacaciones de verano a pesar de que estamos enfrentando la quinta ola de COVID-19.
Primero que nada, es recomendable ir a un lugar que ofrezca las medidas sanitarias indispensables para reducir, en la medida posible, los riesgos de contagio, pero, además, hacerlo con una buena planeación para evitar sobre endeudarnos, considerando los altos niveles de inflación que estamos enfrentando.
Toma en cuenta las siguientes recomendaciones para cuidar tus finanzas en vacaciones:
Haz un presupuesto y planea
El verano es largo y aún tienes tiempo de planear, comparar opciones y decidir con base en tus posibilidades. Recuerda que hay un sinfín de opciones para descansar o desconectarte que no requieren de altas inversiones. Toma en consideración los costos de alimentos, hospedaje, transporte, compras y no rebases tu presupuesto.
Crea una lista de actividades o compras prioritarias.
Si tu presupuesto no te permite cumplir todos tus deseos en el destino elegido, crea una lista de actividades o compras prioritarias.
Utiliza las tarjetas de crédito de manera inteligente
Planea qué monto de tus gastos de vacaciones pondrás a crédito y/o a meses sin intereses e integra estos pagos a tu presupuesto, no cometas el gran error de firmar de más si no vas a poder pagar por completo la deuda al siguiente corte. Además, mantenlas en un lugar seguro para evitar riesgos o utiliza las aplicaciones que te permiten pagar en establecimientos haciendo uso de tu celular sin necesidad de llevar tu tarjeta físicamente.
Revisa los estados de cuenta
Para comprobar que no haya gastos que no hayas hecho o pon alertas por mensajes de texto para que mantengas un historial de gastos.
Organiza un presupuesto post-vacaciones
Analiza si cumpliste con tus planes de gastos, revisa tus ingresos y deudas para que sepas cuánto tienes que dejar de gastar para recuperar tus finanzas. Si te excediste, analiza cuánto y en qué lo hiciste para que tomes mejores decisiones en el futuro.
Controla tus gastos a tu regreso
El regreso a la rutina nos obliga a sacrificar ciertos antojos o gastos innecesarios. Busca reducir consumos para ponerte al día lo más pronto posible en tus finanzas.
En cuanto hayas pagado tus gastos de vacaciones, empieza a diseñar un plan de ahorro e inversión para las que siguen.